Por Edwin Miranda V. | Activo$ Bolivia – La Paz
La planta de cítricos de Caranavi cumplió con su vida útil y la procesadora de café que fue emplazada en Sapecho no funciona hace años, reveló a Activo$ Bolivia la alcaldesa de Caranavi, Susana Lima.
La factoría de cítricos, emplazada a fuerza de violencia y muerte en 2014, ahora es declarada vetusta debido a que la producción de cítricos subió sustancialmente en el municipio y la sobrepasó; por otro lado, la región en la actualidad se dedica exclusivamente a la producción de café, por lo que busca una procesadora que responda a esta necesidad.
En octubre de 2014 se inauguró la planta de cítricos que demandó una inversión de 12,3 millones de bolivianos para una producción diaria de 8.000 a 12.000 litros. Para alcanzar este nivel los productores entregan en promedio 50.000 a 80.000 unidades de fruta por día, entre naranja y mandarina.
Así informó la alcaldesa Susana Lima, que llegó hasta la ciudad de La Paz reclamando atención a un problema estrictamente administrativo para que, finalmente, al cabo de cuatro meses de paralizada la comuna, pueda ser reconocida como máxima autoridad del municipio.
«La procesadora de cítricos nunca debió ser emplaza en Caranavi. Debió estar en el municipio de Palos Blancos, una zona por excelencia productora a naranjas, mandarinas, limones y otras variedades», reflexiona Lima a propósito de los intereses políticos que por entonces primaron, para forzar la construcción de una factoría a todas luces, en un sitio equivocado.
Capital cafetalera
Como capital cafetalera de Bolivia, Caranavi debió pelear por una planta procesadora de café. Pero no logró, hasta ahora, alcanzar este objetivo.
Sucedió algo inédito en el país. Emplazaron una planta de cítricos en Caranavi, donde la producción era casi inexistente, por el contrario, levantaron una procesadora de café en la población de Sapecho, municipio de Palos Blancos, zona ajena a la producción de moca.
«Es una contrariedad asombrosa, pero es la realidad con la que viven actualmente ambos municipios del departamento», señala Lima.
¿Qué hacer ahora? ¿Cómo revertir una situación que perjudica y no ayuda al desarrollo regional en la zona?
En Sapecho, la planta de café no funciona. Está parada hace años y la factoría, realmente es un «elefante blanco», afirma Lima.
Para resolver el dilema, Lima plantea emplazar una factoría moderna en Palos Blancos y trasladar la procesadora de café de Sapecho hasta Caranavi.
«Habrá, sin embargo, que consensuar intereses entre los productores, para no generar problemas sociales», previene la burgomaestre.