Tania Peñaranda Q. | Activo$ Bolivia – Santa Cruz
Diferentes instituciones de Santa Cruz denunciaron públicamente el contrabando de carne de pollo, cerdo, maíz, sorgo y lácteos, los mismos diariamente ingresan al país por la localidad de Tupiza, Potosí, por lo que exigen a las autoridades nacionales y municipales ponerle freno a esta actividad ilícita que no sólo afecta la economía, sino también pone en riesgo la salud debido a que no se someten al control sanitario.
«Exigimos a las autoridades estatales: Aduana Nacional, Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag) y otras instituciones, realicen un control riguroso en las fronteras y centros de abastecimiento para precautelar la salud de la población; asimismo, instamos a la ciudadanía a comprar alimentos que tengan registro sanitario de Senasag, porque el contrabando no sólo afecta a los productores, sino genera pérdidas millonarias», denunció el presidente de la Asociación de Avicultores de Santa Cruz (ADA), Ricardo Alandia Vega.
Por su lado, Eduardo Wills Justiniano, gerente general de la Federación Departamental de Productores de Leche (Fedeple), coincidió con Alandia en que las pérdidas serán millonarias si continúa el contrabando a este ritmo, pues hay muchos productos extranjeros que, aparte de afectar la economía, son de dudosa procedencia, por tanto, ponen en riesgo la salud y la producción nacional. Estos productos generalmente no cumplen con los protocolos de salubridad, lo cual trae consecuencias inimaginables.
En ese sentido, las entidades solicitan a las autoridades del ámbito nacional y a los alcaldes de los municipios fronterizos intensificar los controles no sólo en las fronteras, sino en los mercados.
Producción agrícola
Reinaldo Díaz Salek, presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), señaló por su lado que están esperando que el Gobierno convoque a una reunión para proponer temas que permitan reactivar la economía del país, entre ellos, luchar contra el contrabando.
«Nos llegaron fotos, videos y datos que en el día ingresan al país alrededor de 58 camiones de contrabando, es decir, 1.500 toneladas de maíz, soya y azúcar por la zona de Bermejo, y pollo por el lado de Tupiza. Varios países devaluaron su moneda, abrieron las fronteras y nos afectaron. Por ello decimos que la forma de combatir el contrabando es implementando tecnología, ello derivará en el incremento de la productividad y generará más fuentes de empleo», según Díaz
De su lado, Freddy García Gutiérrez, presidente de la Asociación de Productores de Maíz y Sorgo (Promasor), expresó su preocupación por el contrabando de maíz que ingresa desde Argentina. Si bien no pudieron cuantificar los montos porque el contrabando no proporciona facturas, hicieron un levantamiento de datos como institución. Durante tres semanas observaron que en el kilómetro 8 de la Doble vía La Guardia llegan de contrabando entre 52 y 65 camiones de grano de maíz desde Argentina.
«Si calculamos en promedio los 58 camiones por día, más la cosecha del Sur que dura tres meses, entonces tenemos aproximadamente 130 mil toneladas de maíz que entra de contrabando a Bolivia, sólo de Argentina. Si ponemos un precio de Bs 55 el quintal, nos estaría afectando con $us 22 millones, los mismos dejan de percibir los productores bolivianos, lo cual provoca disminución de los precios, desincentivo y fuga de divisas», lamentó preocupado García.
A su turno, Fidel Flores, vicepresidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), indicó que es importante la tecnología para hacer frente al contrabando, pero también aplicar incentivos y políticas públicas que fomenten la investigación, desarrollo, transferencia de tecnología y abrir mercados.