Redacción: Jonathan Lucero Vargas
En tiempos de pandemia, muchos sienten que aquí se acabó todo, que los sueños se quedaron flotando en el aire y que los proyectos profesionales o personales deben dejarse en el olvido. Sin embargo, existen personas que, a pesar de las adversidades que se presentan en la vida, son capaces de moverse, planificar su futuro y conseguir sus metas.
Si hay gente que ha sido capaz de abrirse paso en medio de la oscuridad, tú también puedes hacerlo.
¿Quién es ese personaje que puede acrecentar su fortuna de manera acelerada, mientras casi todo el mundo está perdiendo?
Y la pregunta del siglo ¡cómo es capaz de hacerlo?
No hay que buscar mucho. Esa persona es Jeff Bezos, creador de Amazon, una de la empresa más fructíferas, rentables e innovadoras del mercado electrónico mundial.
¿Y…? se estarán preguntando los lectores. Hay que resaltar que Bezos no sólo ha aumentado sus ganancias durante los últimos tres meses de emergencia por el Covid-19, sino que es tan ingeniosa la fórmula de ventas de su negocio que logra facturar, según el portal Bussinnes Insider, más de 2.629 dólares por segundo, lo que lo convierte en el hombre más rico del mundo, subiendo su fortuna, en tiempo de pandemia, a más de 189.000 millones.
Para entender cómo logra amasar tanta fortuna, un individuo que tiene las mismas 24 horas de un día, como cualquier mortal de este planeta, es necesario remontarnos a sus primeros pasos.
Jeff nació en Alburquerque en 1964. Cuando apenas era un niño de 4 años, sufrió el abandono de su padre, pero después su madre se casó con un inmigrante cubano llamado Miguel “Mike” Bezos, cuya familia provenía de Villafrechós (Valladolid).
Cuando Jeff tenía 3 años, su madre se empeñó en que estudiara en una escuela Montessori, al igual que lo hicieron los fundadores de Google, el fundador de Wikipedia o, incluso, Henry Ford. Años más tardes, Jeff decidió estudiar Ingeniería Electrónica y Comunicación en Princeton. Cuando se licenció, decidió trasladarse a Nueva York para trabajar en Wall Street.
A pesar de tener una carrera brillante en la bolsa de Nueva York, Jeff era un joven inquieto y extrovertido. Un día del mes de junio de 1994, leyendo un artículo, se dio cuenta que las ventas y rentabilidad de internet habían subido a 2.300%, por lo que dijo: “tengo que estar ahí”.
Para crear la idea, que pronto se convertiría en éxito, Bezzos recolectó información de los 20 productos más vendidos en internet y decidió que se enfocaría en la venta, por catálogo, de libros de colección. Sin embargo, no ganaba lo suficiente para montar su pequeña idea de negocio, por lo que sus padres le prestaron 300 mil dólares, con lo cual él, junto a su esposa y dos operarios más, fundaron a finales de 1995 el sitio de internet Cadabra.com.
El primer libro que Jeff Bezzos vendió por medio de su red se registró el 16 de julio de 1996, el cual cayó en manos de un científico con residencia en Los Ángeles. Contrario a la conformidad, el CEO del portal más famoso del mundo rebuscó nombres para su empresa, pues el original no le parecía atractivo, hasta que se decidió por Amazon.
Algunas personas cercanas a él dicen que el nombre devino del río Amazonas, que Bezzos lo describía como exótico, otros aluden el nombre al algoritmo de Google, puesto que quería que el negocio sea el primero en la lista y así conseguir más clientes.
De ahí en adelante, la empresa creció exponencialmente, puesto que los primeros inversionistas, al notar la versatilidad del negocio, llegaron a depositar a cuentas del negocio 18 millones de dólares, con lo que no sólo devolvió el préstamo a sus padres, sino también le alcanzó para diversificar sus artículos. De este modo, en 2004, Amazon ya no sólo vendía catálogos de libros, sino algunos juguetes y equipos electrónicos, con lo que la cartera de clientes se amplió cada vez más.
En 2014, Bezos invirtió 162 millones en la producción del FirePone, un artefacto que cambiando inteligencia artificial y algoritmos muy bien diseñados, se constituyó en un boom para la época, considerándose el producto estrella. Es en ese momento que la empresa no deja de facturar por encima de los 120 mil millones anuales, superando de manera estrepitosa a Google y Facebook.
En 2017, se supo que el ahora magnate certificó su fortuna en 72 mil millones de dólares, para llegar en esta época de pandemia a más de 189.000 millones, consolidándose hasta el día de hoy como el hombre más rico del mundo.
Sin lugar a dudas, Jeff Bezos se caracteriza por ser visionario. De tener un sueldo bien remunerado en la bolsa de Wall Street pasó a convertirse en multimillonario. ¿Por qué ocurrió eso? Por dos factores tan simples, aplicables a nuestra vida cotidiana. El primero, determinación de alcanzar sus sueños, no importando los obstáculos y riesgos. Segundo, planificación, puesto que si hubiera pedido prestado a sus padres y no hubiera tenido un plan, ese dinero no hubiera sido multiplicado. Por lo tanto, la lección que se extrae de la vida del CEO de Amazon es que aquello que parece imposible de alcanzar, a pesar de los riesgos y adversidades, se convierte en realidad, y que todo depende de uno mismo.