Por Edwin Miranda V. | Activo$ Bolivia – La Paz
La industria hotelera en Bolivia comenzó a levantar cabeza de apoco, mientras el Hotel Presidente —uno de los más emblemáticos en la ciudad de La Paz— empuja este despegue promoviendo ventajas tecnológicas para sus ocasionales clientes y así conquistar preferencia, conoció Activo$ Bolivia de fuentes institucionales.
Lo peor pasó, pero aún la crisis económica que generó el coronavirus en Bolivia y el Mundo golpea al sector, pues a nivel nacional la industria del hospedaje recién comenzó habilitar servicios entre un 15% y 20%, «es algo, pero no lo mejor», señaló a Activo$ Bolivia la presidente de la Cámara Hotelera y de Turismo de Bolivia, Helga Cisneros.
De hecho, entre un 70% a 80% de los hoteles más grandes e importantes en las principales capitales del país se hallan cerrados y acaso esperando apoyo financiero de parte del Gobierno que permita, por ejemplo, alivio financiero para cumplir obligaciones económicas que acogotan a más de uno, reveló la ejecutiva empresarial.
El sector hotelero constituye un componente esencial para el crecimiento económico de un determinado país, pero principalmente para aquellas ciudades consideradas coloniales, donde una de las actividades más importantes son los servicios turísticos, por ello es necesario motivar la creatividad y la innovación para impulsar el desarrollo económico.
El hotel es una unidad esencialmente turística básica, ya que cubre una de las necesidades importantes del turista: el hospedaje. El hotel no vende bienes, sino actitudes, beneficios y satisfacciones, es decir, servicios que deben satisfacer las necesidades y deseos del consumidor.
Siendo esta actividad económica importante en ciudades que se constituyen en atractivos turísticos por sus características coloniales y patrimoniales, los resultados por la venta de los servicios de la industria hotelera se constituyen en un aporte al crecimiento económico estratégico.
Hotel Presidente, a la vanguardia
Hotel Presidente, a pesar de la dura realidad, reabrió sus puertas logrando motivar de forma incipiente el turismo interno.
Por ahora no existe turismo internacional debido a que las fronteras aún permanecen cerradas, aunque Brasil y Perú anunciaron la apertura gradualmente.
Con gastos mensuales que superan los 60.000 dólares, el Hotel Presidente hace frente a la crisis con servicios innovadores y de vanguardia, ante una demanda tecnológica creciente de los usuarios.
Así lo aseguró Antonio Rivero, Administrador en Jefe del Hotel Presidente, en una declaración que hizo a Activo$ Bolivia en la ciudad de La Paz.
Optimismo por delante, Rivero dijo que espera nuevos tiempos hasta fin de año.
«Entre octubre y diciembre esperamos estar completos, llenos al 100%», se motiva con énfasis el administrativo.
La innovación será clave para que las empresas hoteleras sigan siendo relevantes y den respuesta a los diferentes perfiles, necesidades y expectativas de los viajeros, entre ellos los emergentes millennials y la generación Z.
Una pieza fundamental, en suma, para aquellas marcas que quieran competir con los nuevos jugadores ofreciendo, por ejemplo, un nuevo tipo de lujo asequible o dando especial valor a las experiencias y al diseño social en los exitosos micro-hoteles. Habrá que esperar qué sucede.