Redacción | Activo$ Bolivia
El aguayo y el bordado artesanal típico de Tarija se convierte en carteras, aretes, blusas, manillas y otros accesorios en Andaluza, un emprendimiento creado por Ana Karina Romero. Su calidad, diseños y modelo de negocio lograron que fuera el único emprendimiento tarijeño entre los 15 finalistas del concurso “Emprender en tiempos de crisis”, convocado por la Fundación Samuel Doria Medina A.
En 2020, Ana Karina se inscribió al Centro de Autoempleo Productivo (CAP) abierto por la Alcaldía de Tarija para aprender bordados. Mientras aprendía, veía que varias de sus compañeras tenían talento y un trabajo de calidad, pero faltaban a las capacitaciones porque necesitaban generar dinero para el sustento diario, además veía que sufrían violencia intrafamiliar y económica.
Ahí surgió la idea de su negocio y el propósito que le daría porque el objetivo era ayudar a esas mujeres, generar fuentes de empleo para ellas, poner en valor su talento y premiar a las más responsables.
Los diseños están a cargo de Ana Karina combinando lo artesanal con un toque moderno. Ella elige los colores, las combinaciones, las telas y el bordado y ensamblaje de las prendas y accesorios están a cargo de las mujeres del CAP y de otros centros similares.
Han pasado alrededor de tres años desde que surgió Andaluza y Ana Karina logró construir una importante red de ventas. Primero vendía sus accesorios en una tienda colaborativa con otras marcas tarijeñas, ahora tiene sus propios centros de venta en Tarija (2), en Santa Cruz (2) y en La Paz (2). También participa en ferias distritales y vende por redes sociales.
Planea expandir sus centros de venta a Cochabamba y Sucre, ya que su capacidad de producción ya se lo permite.