Gustavo Villarroel Terrazas | Activo$ Bolivia
Es una joven que supo vencer los miedos, que se atrevió a dejar la precaria seguridad de un salario mensual para renunciar a su empleo y actuar con determinación, una cualidad que muy pocos asumen en su vida.
Su nombre es María Belén Rivas Nacica, tiene 24 años de edad, nació en Santa Cruz y es licenciada en Diseño Industrial.
Lleva poco más de tres meses manejando su emprendimiento de gelato italiano al que bautizó como Solé Galería de Gelato y así lo promociona en sus redes sociales.
“Este proyecto y esta hermosa marca surgió de una idea que nació en julio del 2023. En ese entonces yo me encontraba por finalizar mi tesis, que estaba realizando de manera semipresencial. Mientras, ya estaba por cumplir dos años de trabajar en horario de oficina como diseñadora gráfica”, relata.
Su vida laboral como diseñadora independiente comenzó mientras estudiaba. Diseñaba identidades visuales, marcas, stands y similares.
Era una época en la que fue adquiriendo experiencia y trabajaba en horario fijo, cómodamente; pero se dio cuenta de que eso no le satisfacía. Sentía que, con el tiempo, su empleo no le iba a dar más frutos que un simple sueldo que le llegaba cada mes y lo gastaba en el mismo mes.
Una idea surgida en un viaje
La idea de emprender haciendo helados nació en uno de sus viajes a Argentina, una ciudad con mucha influencia italiana y donde hay bastantes gelatos. “Entonces, como todos, empecé desde cero. El paso número uno fue investigar, aprender porque me dije: para hacer helados tengo que aprender a hacer helados, por eso busqué dónde podía estudiar y prepararme”, explica.
Vio que en Bolivia no había una academia de gelato, pero la encontró en Argentina a donde se fue a estudiar y, posteriormente, se fue a Brasil a perfeccionar sus conocimientos de gelatería.
“Pero el que yo considero el paso más importante, y creo que es el que asumen todos los emprendedores que triunfan, es lo que se llama determinación. Yo tuve determinación al decidir emprender en este rubro porque, gracias a Dios y al apoyo de mis padres, no tuve miedo en renunciar a mi trabajo. Yo me decidí por emprender en los helados y no tuve miedo de dejar todo. Decidí enfocarme absolutamente en mi emprendimiento”, reflexiona.
Así como comenzó todo. Su primer curso inició en noviembre de 2023 hasta abril de 2024 entre Argentina y Brasil. El resto del año 2024 se dedicó a hacer pruebas, recetas y perfeccionar sus estudios.
Arte hecho sabor
Su producto se caracteriza por ser un gelato 100% artesanal, con sabores auténticos, intensos y, sobre todo, de alta calidad.
Para el proceso de elaboración no se utilizan colorantes, saborizantes ni conservantes, es un producto natural, que cuida todos los procesos y los estándares para su elaboración.
“Otra característica muy importante es la marca. Es una esencia veraniega, sole significa sol en italiano porque refleja el verano y la autenticidad de lo que es un verdadero gelato italiano. Maneja toda una identidad porque cada sabor es una obra de arte. Toda la marca está creada alrededor del arte, en los sabores, en las pinturas, en los botes, en el diseño. Todo el arte que refleje lo hecho a mano”, precisa.
Por ahora, el emprendimiento opera enviando pedidos por delivery; pero María Belén anuncia que muy pronto tendrá su primer local físico en pleno centro de Santa Cruz.