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Edwin Carpio San Miguel | Activo$ Bolivia

Uno de los hombres más ricos en la historia del mundo es John Davidson Rockefeller. Un hombre que fue pobre durante su infancia, pero que tuvo la habilidad de convertirse en el magnate y filántropo más notable de Estados Unidos.

Amasó una fortuna estimada en 1.400 millones de dólares o 1.5% del Producto Interno Bruto de Estados Unidos en 1937, el año de su muerte. ¿Cuáles eran sus secretos para el éxito? A continuación, te presentamos cuatro de sus consejos:

PRIMER CONSEJO

Grandes ingresos, grandes sacrificios. Muchas personas que nacen en medio de la pobreza piensan que convertirse en rico es imposible, pero eso no es cierto. Por lo general, el ciclo de vida de las personas se limita a ir a la escuela, estudiar, conseguir un empleo seguro y obtener un sueldo; un esquema de vida que sigue el 95% de la población mundial.

Sin embargo, para ser rico es preciso hacer grandes esfuerzos y no hacer lo que hace la mayoría, sino hacer lo que la mayoría no se atreve. Por ejemplo, ser emprendedor implica dormir tarde y despertar temprano; tener muchos conocidos y pocos amigos; vivir unos años como el 5% de las personas lo hace para después vivir como el 5% quiere, ese es el precio del éxito. Para ello, las personas necesitan tener disciplina militar y dejar de salir los fines de semana a divertirse y emborracharse.

Rockefeller aconsejaba que, para ser rico, hay que hacer lo que la mayoría no se atreve.

SEGUNDO CONSEJO

Emprende. Rockefeller, después de trabajar cinco años como contador en una compañía comercial, decidió crear su propio negocio de granos, insumos y materias primas asociándose con un compañero de trabajo. Con ese negocio, logró convertirse en un exitoso comerciante y con el capital que hizo emprendió otro negocio más rentable.

Rockefeller vio la oportunidad de invertir en petróleo y no dudo para asociarse nuevamente con otra persona. Al igual que él, las personas pueden hacer lo mismo y escalar financieramente sin tener que esperar un milagro. Lo importante es adquirir experiencia y dejar de ser un empleado. Sólo se puede ir creciendo cuando buscas nuevas oportunidades de negocio.

TERCER CONSEJO

Crea más fuentes de ingreso. Lo importante es no ser conformista y creer que por tener un negocio las cosas serán siempre así. Rockefeller recuerda que los tiempos cambian, la economía cambia permanentemente y el negocio que hoy es rentable quizá mañana ya no lo sea, por lo tanto, aconseja diversificar e invertir en nuevos activos.

CUARTO CONSEJO

No incrementes tus gastos cuando comiences a obtener grandes ganancias. Es la enseñanza más importante que deja el multimillonario. Así como se valora al dinero cuando uno no lo tiene, la misma valoración debe asignarse cuando se lo obtiene. No es sano despilfarrar el dinero ganado dejando que las emociones dominen el deseo de gastar, pero tampoco se debe ser tacaño. Valorar el dinero debe ser una premisa de vida, por ello recomienda no comprar cosas innecesarias ni gastar para aparentar porque, si lo haces, el dinero desaparecerá tan rápido como llegó.