Redacción | Activo$ Bolivia
Nueve días de bloqueos y Cochabamba sigue asfixiada. La producción se frena, los empleos peligran y las pérdidas ya superan los 800 millones de bolivianos, según la Federación de Entidades Empresariales Privadas de Cochabamba (FEPC).
Cansados del cerco y de la falta de respuestas efectivas, los principales líderes del sector privado se reunieron con el Ministerio de Gobierno, la Policía y la Central Obrera Departamental, buscando soluciones reales y rápidas. El objetivo es recuperar el libre tránsito.
Al encuentro asistieron autoridades de alto nivel como el ministro de Gobierno, Roberto Ríos; la viceministra Carola Arraya; y los comandantes de la Policía a nivel nacional y departamental. Por parte del empresariado, estuvieron representantes de la Cámara de Construcción, la Cámara de Mujeres Empresarias, la Asociación de Industriales de Santivañez y la Cámara de Exportadores, entre otros.
Cifras que duelen
Desde que comenzaron los bloqueos, el aparato productivo regional vive una parálisis que no da tregua. Juan Pablo Demeure, presidente de la FEPC, fue tajante al señalar que: “Cada día de bloqueo significa paralización productiva, pérdida de empleos y desabastecimiento. Sin combustibles ni rutas, el país se apaga”.
Las pérdidas económicas se calculan en 1.137,4 millones de bolivianos a causa de los bloqueos de caminos acumulados entre enero y el 10 de junio de 2025. El dato se desprende del Reporte de Afectación Empresarial, elaborado por la Unidad de Análisis Económico (UAE) de la FEPC, que monitorea de forma continua los impactos productivos del conflicto social.
El bloqueo ha desarticulado el funcionamiento logístico del Parque Industrial Santiváñez, que alberga más de 140 industrias orientadas a exportación. Más del 70% de su producción permanece detenida, poniendo en riesgo 3.500 empleos directos e indirectos y paralizando operaciones con mercados externos.
En paralelo, sectores agropecuarios reportan más de 4,8 millones de pollos que no han podido llegar a los mercados, 20.000 cabezas de ganado lechero en riesgo de muerte por falta de alimento sumado a 150.000 litros de leche no entregados, causando efectos inmediatos en precios, escasez y pérdida de capital de trabajo.
“La interrupción de exportaciones valorizadas en USD 10,5 millones diarios, el cierre operativo de dos empresas por día y la imposibilidad de garantizar abastecimiento a los centros urbanos agravan un entorno de creciente incertidumbre económica. El riesgo ya no es solo de pérdida, sino de quiebre funcional del aparato productivo regional”, dice el documento.
¿Y qué se decidió?
Tras la reunión, se estableció una coordinación directa entre el sector empresarial, la Policía y el Ministerio de Gobierno para seguir de cerca las acciones de seguridad. Pero el pedido central fue uno solo: intervenir los bloqueos ya.
“Es insostenible seguir con la ciudad bloqueada. Necesitamos libertad para trabajar, para movernos, para producir”, afirmó Demeure.
Aunque reconocen que hay limitaciones logísticas para la Policía, los empresarios insisten en que no se puede seguir tolerando que la economía se hunda por conflictos políticos.
Se espera que en las próximas horas haya resultados para que Cochabamba vuelva a moverse. Porque si no se hace nada, el costo será mucho mayor.