Redacción | Activo$ Bolivia

La imagen de Nemia Coca se hizo viral en estos días con el triunfo del Héctor Garibay en la Maratón de Ciudad de México. Ella es su entrenadora y, en los últimos años, se convirtió en la entrenadora estrella porque todos los atletas que entrenan con ella llegan a “las ligas mayores” y con grandes resultados.

Ella trabaja en la Alcaldía de Oruro y con el Servicio Departamental de Deportes. Además de Garibay, también entrenan con ella David Ninavia, Vidal Basco, Daniel Toroya y Ana María Marza, quienes lograron importantes sitiales en competencias internacionales.

Pero llegar hasta ahí no fue nada fácil, según reseñan medios como La Patria de Oruro. Nemia vivió una infancia azarosa y llena de carencias. Ella nació el 24 de octubre de 1966, en Oruro, y su familia era de muy escasos recursos, tanto que ella y sus dos hermanos debían compartir los zapatos y era una pela usarlos, según cuenta ella misma.

Nemia Coca, la entrenadora de ganadores.

Es una persona que siempre vio una oportunidad en las adversidades, es por eso que, cuando aún era adolescente, al ver una convocatoria a una carrera que auspiciaba la firma Manaco, no dudó en inscribirse porque el premio eran zapatillas deportivas. Le costó lograrlo porque su maestro no la nominó y tuvo que pedir ser incluida por su cuenta.

Consiguió participar y con buen resultado porque estuvo entre los primeros lugares. La fecha le quedó grabada porque era el día que cumplía 15 años.

Fue el inicio de varios logros deportivos, incluso llegó a participar en los Juegos Olímpicos de Atlanta, en 1996, y hasta portó la antorcha olímpica.

Una desgracia llegó a su vida: se lesionó la espalda. Se vio obligada a dejar de competir, pero con su espíritu indomable no se dio por vencida y no se alejó del deporte porque abrió su escuela de atletismo a la que bautizó como “Pie de Viento”. Ya era adulta, estaba casada y su esposo compartió su sueño.

Ella suele aconsejar a quienes tengan un sueño, que se esfuercen por cumplirlo. Sea en el área que sea, lo importante es “dar todo”. Afirma que, para triunfar, hay que fijarse metas, luchar y ser perseverante.