Al menos diez licitaciones del Gobierno han quedado desiertas en los últimos meses, según datos de CADECO Cochabamba. (Foto: CADECOCRUZ)
Edwin Carpio San Miguel | Activo$ Bolivia
La construcción, uno de los motores de la economía, está en alerta roja. Cada vez más empresas están optando por no participar en licitaciones públicas debido a la incertidumbre financiera, el encarecimiento de materiales y la falta de dólares.
Jorge Siles, presidente de la Cámara de la Construcción de Cochabamba (CADECO), advierte que la situación es insostenible y ya ha provocado el cierre de compañías y la paralización de proyectos clave.
Materiales por las nubes y contratos de alto riesgo
El mayor problema es el alza de precios. La escasez de divisas ha disparado el costo de insumos importados hasta en un 70%, generando un escenario impredecible para las constructoras.
«Firmamos un contrato con un precio hoy, pero en tres meses el material puede costar 50% más. Es imposible trabajar así», explica Siles.
Como resultado, al menos diez licitaciones del Gobierno han quedado desiertas en los últimos meses. Nadie quiere asumir un contrato cuyo presupuesto se quede corto a la mitad del camino, mientras el Estado mantiene sus precios congelados.
Pagos demorados y empresas al borde del cierre
A esta crisis se suma otro problema: el retraso en los pagos. Muchas empresas ya están asfixiadas por deudas fiscales y la falta de liquidez las pone al borde del colapso.
Según una encuesta de CADECO, el 10% de las constructoras en Cochabamba podría cerrar, mientras que un 20% enfrenta graves dificultades económicas.
«Si no hay inversión pública, la construcción se detiene. Y si la construcción se detiene, la economía también sufre», advierte Siles.
El sector pide medidas urgentes: acceso a divisas para importar insumos, reajuste de precios en los contratos públicos y alivio fiscal para las empresas más afectadas.
Mientras tanto, la parálisis en la inversión pública sigue creciendo, afectando la infraestructura, el empleo y el desarrollo regional.
Líderes empresariales de diferentes sectores del país cuando se dirigían a entregar el proyecto de decreto supremo, en La Paz.
Redacción | Activo$ Bolivia
En medio de la crisis de abastecimiento de gasolina y diésel, el sector privado tiene una propuesta concreta para cambiar el juego. La Cámara Nacional de Industrias (CNI), en representación del Comité Multisectorial, presentó un proyecto de Decreto Supremo que busca liberar la importación, el transporte y la comercialización de combustibles en Bolivia.
El documento fue enviado al presidente Luis Arce y plantea tres objetivos clave: garantizar el suministro de combustibles, fomentar la competencia en el mercado y proteger los derechos de los consumidores.
«Creemos que esta regulación es fundamental para el desarrollo económico y social del país», sostuvo Pablo Camacho, presidente de la CNI.
Pero la propuesta va más allá: también busca incentivar la importación mediante una exención del gravamen arancelario durante tres años. Según los industriales, esto permitiría una reactivación económica al reducir costos y agilizar la distribución de combustibles en el país.
«Estamos seguros de que este proyecto beneficiará a la economía boliviana, a los consumidores y a las empresas que operan en el sector. Por eso, solicitamos su pronta consideración», explicó Camacho.
El sector privado deja claro que está listo para negociar y trabajar en conjunto con el Gobierno para encontrar una solución efectiva a la crisis energética. Ahora la pelota está en la cancha del Ejecutivo, que deberá decidir si apuesta por la libre importación o mantiene el control estatal sobre los combustibles.
El combustible es indispensable para operar la maquinaria necesaria para cosechar granos.
Redacción | Activo$ Bolivia
La desesperación se ha instalado entre los productores de soya, maíz y sorgo. Desde noviembre de 2024, el sector enfrenta una crisis de abastecimiento de diésel que amenaza con arruinar la cosecha de la campaña de verano. La situación es tan grave que los agricultores analizan una propuesta del Gobierno: importar combustible y pagarlo a precio internacional.
Fernando Romero, presidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (ANAPO), explicó que el sector sostuvo reuniones con el ministro de Hidrocarburos y Energía, Alejandro Gallardo, y el presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen. En esos encuentros, quedó claro que el Estado no tiene suficientes divisas para pagar a los proveedores de diésel y garantizar el suministro.
Como salida de emergencia, el Gobierno sugirió que los productores importen el combustible a precio internacional. La idea no convence del todo a ANAPO; pero, ante la crisis, están socializando la propuesta entre los 14.000 agricultores afiliados.
«No apoyamos la propuesta, pero necesitamos considerar todas las alternativas para salvar la inversión de miles de productores», explicó Romero.
El problema de fondo, dicen los productores, es que esta medida no resuelve el déficit estructural de combustibles. La falta de diésel ya ha encarecido los costos de producción y reducido la competitividad del agro boliviano.
Por si fuera poco, la crisis de combustible se suma a otros golpes para el sector: condiciones climáticas adversas, campos inundados y la reciente suspensión de exportaciones de grano de soya.
ANAPO exige que el Gobierno garantice el abastecimiento de diésel de forma estable y a precios accesibles para evitar un colapso de la producción nacional. Sin soluciones rápidas, la seguridad alimentaria del país podría estar en riesgo.
Imagen de archivo de la peregrinación al santuario de la Virgen de Urkupiña. (Foto: ANF)
Edwin Carpio San Miguel | Activo$ Bolivia
El turismo en Cochabamba está en problemas y, esta vez, el motivo es la incertidumbre sobre la fecha de la Festividad de la Virgen de Urkupiña.
Cada año, la festividad religiosa atrae a miles de visitantes nacionales e internacionales; pero en esta ocasión, la falta de una decisión firme sobre su realización ha comenzado a pasar factura. Según Carlos Contreras, presidente de la Asociación de Hoteles de Cochabamba (Asohco), la indefinición ya provocó la cancelación del 30% de las reservas hoteleras, poniendo en riesgo la economía del sector.
El conflicto surge porque la celebración, tradicionalmente programada para el 14, 15 y 16 de agosto, coincide con las elecciones generales del 17 de agosto. La Iglesia y la Alcaldía de Quillacollo han mostrado disposición a reprogramarla después del 6 de agosto, pero el presidente de la Asociación de Conjuntos Folklóricos Virgen de Urkupiña, René Valdez, insiste en mantener las fechas originales, generando un bloqueo en la planificación.
Para los hoteleros y operadores turísticos, el problema no es menor. El «auto de buen gobierno», que restringe la movilidad durante los comicios, complicará la llegada de turistas, quienes ya han comenzado a buscar otros destinos.
Contreras y los empresarios turísticos proponen mover la festividad al 8 y 12 de agosto, aprovechando los feriados patrios del 6 y 7. Esto permitiría una semana completa de actividades que beneficien la economía local y reduzcan las pérdidas.
«Si no se define pronto, las pérdidas seguirán aumentando. Necesitamos certeza para poder promocionar Cochabamba y recuperar la confianza de los turistas», advierte Contreras.
Mientras las instituciones siguen en desacuerdo, el turismo en Cochabamba se resiente y el tiempo para tomar una decisión se agota.
Los especuladores hacen su «agosto» en el mercado negro del dólar. (Foto: Bloomberg Lìnea)
Sandra Arias Lazcano | Activo$ Bolivia
El mercado del dólar en Bolivia atraviesa una etapa crítica, marcada por la volatilidad y la incertidumbre. Desde hace unos dos años, el mercado negro se ha consolidado y sigue creciendo debido a una política monetaria que no ha logrado frenar el problema, según el economista Luis Fernando Romero.
Atrás quedaron los días en los que el Banco Central de Bolivia (BCB) ofrecía un tipo de cambio preferencial a los exportadores del sector agropecuario oriental con la esperanza de fortalecer las Reservas Internacionales. Hoy, el déficit de dólares es evidente: hay una enorme demanda insatisfecha y una oferta limitada, tanto del BCB como del sistema financiero. Esto ha generado una especie de «corralito bancario», donde muchas personas no pueden retirar libremente sus ahorros en dólares, explica Romero, quien preside el Colegio de Economistas de Tarija.
La escasez también afecta a empresarios, gremialistas y al sector público, que no pueden acceder a la divisa con normalidad. En 2024, el sector público registró un déficit de 119 millones de dólares, lo que obligó al BCB a vender más de 30 toneladas de oro de las Reservas Internacionales para cubrir pagos de deuda externa y la importación de carburantes.
Romero dice que un ejemplo claro de esta volatilidad se dio en la primera quincena de marzo, cuando ejecutivos de YPFB admitieron que la empresa no tenía liquidez suficiente para cubrir la demanda de combustibles. La reacción fue inmediata: el dólar en el mercado paralelo alcanzó los 12 bolivianos. Aunque hubo un breve periodo de estabilidad, este se rompió cuando el Gobierno reconoció su incapacidad para garantizar el abastecimiento de carburantes.
Con este panorama, el tipo de cambio oficial de 6,96 parece una reliquia del pasado. La tendencia indica que el dólar seguirá subiendo y que el próximo gobierno podría verse obligado a devaluar la moneda para aliviar la presión y controlar el mercado negro.
Según el experto, la escasez de dólares sólo podría revertirse con medidas estructurales, como la reducción del déficit fiscal, el incentivo a las exportaciones o la atracción de inversión extranjera. También podría ayudar el aumento de remesas, pero eso depende más del contexto internacional que de las políticas locales.
Para complicar aún más las cosas, Romero afirma que el dólar no es el único factor de incertidumbre en Bolivia. La economía también está atada a los criptoactivos y a un escenario político inestable. Además, lo que ocurra en Estados Unidos con Donald Trump podría impactar la economía global y, por supuesto, la boliviana.
El futuro del dólar en Bolivia sigue siendo incierto. Lo único seguro es que el precio de 6,96 ya es historia.
La Hora del Planeta es un evento global impulsado por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).
Redacción | Activo$ Bolivia
Este 22 de marzo no será un sábado cualquiera. A las 20:30 horas, millones de personas en más de 180 países se sumarán al evento ambiental más esperado del año: la Hora del Planeta. Un evento global impulsado por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) que, en 2025, trae consigo una poderosa urgencia: proteger el agua, un recurso vital y cada vez más amenazado.
En Bolivia, la jornada llega con actividades que van desde talleres y charlas hasta acciones de limpieza, organizadas por más de 160 organizaciones locales. Bajo el lema «Si hay agua, hay vida», el país se unirá al movimiento global apagando las luces no esenciales durante una hora, mientras se reflexiona sobre la crisis hídrica que enfrenta el mundo.
Alfonso Llobet, representante a.i. de WWF Bolivia, no duda en subrayar la importancia de este evento: “La crisis hídrica es una de las amenazas más graves que enfrentamos, con impactos directos en la biodiversidad, la producción de alimentos y el bienestar de las comunidades. La Hora del Planeta es una oportunidad única para tomar acción y salvar nuestros ríos, lagos, humedales y acuíferos”.
La situación nunca ha sido tan crítica. Kirsten Schuijt, directora General de WWF International, lo deja claro: “El año pasado fue el más caluroso de la historia y nos enfrentamos a una década de temperaturas extremas. Los incendios, las tormentas y las sequías nos han golpeado como nunca antes. La Hora del Planeta es un recordatorio de que estamos en un punto de inflexión. Si no actuamos ahora, el futuro de nuestros ecosistemas está en peligro”.
Y es que, aunque pueda parecer solo una hora de apagón, la Hora del Planeta representa mucho más que eso. Es un grito global de acción colectiva que tiene el poder de cambiar el curso del futuro. En Bolivia, cada rincón del país, desde las grandes ciudades hasta los municipios más pequeños, se convertirá en un punto de encuentro para sensibilizar a la ciudadanía. Además de la acción simbólica de apagar las luces, habrá actividades culturales y educativas, especialmente centradas en el agua, para recordar que, si este recurso se agota, se pone en riesgo la vida misma en el planeta.
Lo más hermoso de esta iniciativa es el mensaje de esperanza. Aunque parezca solo una hora, durante esos 60 minutos, miles de personas se unirán para demostrar que sí se puede generar un impacto positivo. “No se trata solo de apagar luces; se trata de crear un movimiento global por el cambio”, dice Schuijt, y tiene razón. Esa pequeña acción tiene el poder de inspirar grandes cambios.
Así que este sábado, cuando llegue la Hora del Planeta, apaga las luces y enciende la esperanza. Porque con cada gesto, por pequeño que sea, estamos construyendo un futuro más sostenible para todos. ¡Es hora de actuar!
La Feria Exposición Internacional de Cochabamba (FEXCO 2025) está lista para ser un evento de gran magnitud. Con la Rueda de Negocios y la Vitrina de Negocios como los protagonistas, se proyecta que el evento genere un impacto económico de 70 millones de dólares, según el presidente de la FEPC, Juan Pablo Demeure. Estas plataformas de intercambio comercial no sólo fortalecerán el ecosistema empresarial local, sino que atraerán inversión extranjera, lo que se traducirá en miles de nuevos empleos para la región.
La Rueda de Negocios reunirá a más de 300 empresarios nacionales e internacionales, facilitando más de 3.000 encuentros comerciales en solo dos días. Con la participación de países de la Comunidad Andina y el Mercosur, se espera que el evento impulse la internacionalización de productos bolivianos y cree nuevas alianzas estratégicas.
Por su parte, la Vitrina de Negocios destacará las capacidades exportadoras de Cochabamba y Bolivia, con compradores internacionales certificados de mercados clave como Estados Unidos, Argentina, Chile y más.
Este evento también impactará positivamente en sectores complementarios como el turismo, la gastronomía y la logística, con un aumento en la ocupación hotelera y el consumo local. Se estima que FEXCO 2025 generará más de 35.000 empleos directos e indirectos, solidificando a la feria como uno de los eventos económicos más importantes del país. ¡Cochabamba se prepara para brillar!
Representantes de la FEXCO 2025, organizada por la Alcaldía y la FEPC, en la presentación de las actividades del evento ferial.
Edwin Carpio San Miguel | Activo$ Bolivia
Con un extenso cronograma de actividades la FEXCO 2025 busca impulsar la economía, fomentar la inversión y fortalecer las actividades empresariales de Cochabamba y del país. En ese marco, desde el 24 de abril hasta el 4 de mayo, la feria ofrecerá conferencias, conversatorios, ruedas de negocios y encuentros sectoriales de alto nivel.
Franquicias
Con un conversatorio sobre franquicias se abrirá el telón de la cartelera de actividades en la Fexco el próximo el 24 de abril. Este encuentro tendrá lugar en el Centro Internacional de Negocios y contará con la participación de destacados expertos nacionales e internacionales. Esa misma jornada, se exhibirán los proyectos finalistas de los premios OYE y KAMAY, que reconocen la innovación y el emprendimiento en Bolivia.
Criptoactivos
El 25 de abril estará marcado por un taller sobre Bitcoin y criptoactivos, dirigido a empresarios y público interesado en tecnologías financieras. Posteriormente, el 26 y 27 de abril se celebrará el Encuentro Nacional de Turismo que reunirá a municipios y empresas del sector para discutir estrategias de desarrollo, incluyendo la presentación oficial del Buró de Convenciones y Eventos de Cochabamba.
Los días 28 y 29 de abril se llevará a cabo la Rueda Empresarial de Negocios, donde se esperan más de 300 participantes y miles de citas comerciales. El 30 de abril, la Vitrina Comercial Exportadora permitirá a empresas bolivianas conectarse con compradores internacionales, cerrando la jornada con una Noche Empresarial de networking.
Inteligencia artificial
El 1 de mayo, en colaboración con la Universidad Franz Tamayo (UNIFRANZ), se abordará sobre la inteligencia artificial aplicada a los negocios, con conferencias programadas. El 2 de mayo, la agenda se centrará en la transición energética y el potencial del litio, con especial atención a la electromovilidad.
Para las dos últimas jornadas (3y 4 de mayo) están previstas: La Noche de Distinciones, donde se premiará a los expositores más destacados y el lanzamiento de la FEXCO 2026. Finalmente, el 4 de mayo, la feria concluirá con una convención dedicada a la industria del entretenimiento y la cultura alternativa.
Surgen dudas sobre la capacidad de pago de la deuda externa en Bolivia.
Redacción | Activo$ Bolivia
En medio de los temores sobre un posible default o impago de las obligaciones internacionales de Bolivia, el ministro de Economía, Marcelo Montenegro, ha salido a garantizar que el país cumplirá con sus pagos de deuda externa en 2025.
Sobre el tema, el economista Luis Fernando Romero explica que, en 2024, Bolivia ya pagó un total de $1.526,1 millones por el servicio de su deuda externa, incluyendo $108,8 millones destinados a los bonos soberanos. Sin embargo, poco se habla de otros pasivos externos: los Derechos Especiales de Giro (DEG), activos que forman parte de las Reservas Internacionales Netas (RIN) de Bolivia.
Romero, presidente del Colegio de Economistas de Tarija, explica que son un activo de reserva internacional asignados a los países miembros del Fondo Monetario Internacional (FMI), que pueden ser monetizados o convertidos en alguna divisa, como el caso del dólar.
“Pues esto es lo que hizo en los últimos años el gobierno de Arce Catacora, cambiar los DEG por dólares, para tener una liquidez temporal, y financiar el gasto corriente, ante los problemas financieros evidentes en el sector público del país”, añade.
En agosto de 2021, el FMI asignó a Bolivia 230,13 millones de DEG adicionales, con lo cual su monto acumulado ascendió a 394,26 millones de DEG, de los cuales actualmente solo quedan 14,81 millones de DEG (19,74 millones de dólares), es decir el 3,76%.
Pero el uso de los DEG, no es indefinido ni gratuito. Debe reintegrarse al FMI como una especie de pago de servicio de deuda externa y por esto se debería contemplarse en las estadísticas de deuda externa del BCB, cosa que no ha ocurrido, a pesar de las asignaciones hechas por el FMI. Tampoco se observa, en los informes del BCB, que los DEG asignados y monetizados se encuentran registrados como pago servicio de deuda externa del país.
Así que, aunque la deuda externa se paga, la pregunta sigue siendo: ¿realmente sabemos cómo se han usado esos DEG y cómo eso impactará en las finanzas del país en los próximos años?
El rector de ESAE, Rilmar Sejas (izq.) junto a personal del instituto en la fachada del terreno cedido por la Gobernación.
Edwin Carpio San Miguel | Activo$ Bolivia
Cochabamba acaba de recibir una noticia que marcará un antes y un después en su oferta educativa técnica superior. El gobernador Humberto Sánchez ha entregado oficialmente el terreno para la construcción del nuevo edificio del Instituto Técnico Superior de Comercio y Administración (ESAE), un sueño largamente esperado por la comunidad educativa. Este acontecimiento es un hito histórico para el instituto, que desde hace más de 50 años había estado funcionando sin una sede propia. ¡Ya era hora!
El acto, que contó con la presencia de autoridades locales y nacionales, incluyó a figuras como el presidente de la Brigada Parlamentaria de Cochabamba, Juan Zurita Escalera, y la presidenta de la Comisión Primera de la Asamblea Legislativa Departamental, Liliana Maldonado, quienes resaltaron la importancia de este avance para la educación técnica en la región. A ellos se sumaron el rector del Instituto ESAE, Ing. Rilmar Sejas Bernal, docentes, estudiantes y otros representantes educativos.
La educación técnica toma fuerza en Cochabamba
El gobernador Humberto Sánchez destacó el firme compromiso de la Gobernación con la educación técnica y superior, resaltando que este tipo de instituciones son clave para el desarrollo del departamento. «Los institutos tecnológicos y técnicos superiores son una prioridad para el crecimiento de Cochabamba. Con este nuevo espacio, ESAE podrá ampliar su oferta académica y brindar condiciones óptimas para la enseñanza», afirmó.
Esta nueva sede no solo permitirá al instituto ofrecer una formación más amplia y mejor, sino que también se convierte en una señal de apoyo a las futuras generaciones de estudiantes. Rilmar Sejas, rector del ESAE, expresó su agradecimiento, señalando que esta obra representa el cumplimiento de un sueño que durante años había sido una aspiración para todos los que forman parte de esta institución. «Después de más de cinco décadas de funcionar en espacios prestados, hoy damos un paso fundamental hacia la consolidación de una infraestructura propia», aseguró Sejas.
Un espacio que representa esfuerzo y perseverancia
Para Nardi Terrazas, estudiante del instituto, este nuevo edificio tiene un valor muy especial. «Este espacio es el reflejo del esfuerzo y la perseverancia de muchas generaciones que han pasado por nuestro instituto», comentó, destacando el impacto positivo que este proyecto tendrá en su formación y en la de futuros estudiantes.
La ceremonia también fue una oportunidad para que la comunidad educativa del ESAE expresara su agradecimiento al gobernador Sánchez, entregándole un reconocimiento por su apoyo a la educación y al desarrollo de la región. Además, se presentaron los planos del proyecto arquitectónico, lo que deja claro el compromiso de la Gobernación de seguir gestionando recursos para la ejecución de este importante proyecto.
Este 19 de marzo quedará grabado en la memoria de la comunidad educativa del ESAE como el inicio de una nueva etapa. La nueva sede se ubica en la calle Santivañez, entre Tumusla y Hamiraya, y tendrá una superficie de 574,67 metros cuadrados. Con esta infraestructura, Cochabamba da un gran paso en la consolidación de la educación técnica, que seguirá siendo clave para el crecimiento de la región.
En medio de una crisis económica que ha golpeado a muchas naciones, Bolivia podría encontrar su mayor aliado en un recurso menos convencional pero igualmente poderoso: su gente. Así lo asegura Rolando López, vicerrector de la Universidad Franz Tamayo (UNIFRANZ) en Cochabamba, quien afirma que el talento humano, la creatividad y el conocimiento son los motores que pueden llevar al país hacia un futuro más prometedor, en un contexto de transformación digital.
Bolivia, históricamente conocida por su dependencia de los recursos naturales como el gas o los minerales, está a punto de dar un giro importante. López sostiene que es hora de dejar atrás esa dependencia y apostar por el capital humano, que tiene un potencial aún más grande para generar nuevas oportunidades de negocio. En este sentido, Cochabamba se erige como ejemplo claro de esta transformación, posicionándose como un referente en la exportación de tecnología y desarrollo de software.
«El talento humano es el recurso más valioso», enfatiza López. Y es que, si bien la minería y el petróleo han sido durante años los pilares de la economía boliviana, ahora el verdadero desafío está en cómo adaptar y evolucionar esas riquezas hacia un modelo más sustentable y digital. En este escenario, la creatividad y la tecnología tienen un papel crucial, convirtiéndose en elementos fundamentales para el emprendimiento y la innovación.
La educación como motor de cambio
Un desafío crucial es la formación de profesionales con habilidades para emprender y gestionar empresas, adaptándose a un entorno global que cambia a velocidad vertiginosa. López destaca que el sistema educativo boliviano debe centrarse en preparar a los estudiantes para afrontar este desafío, incorporando tecnologías emergentes como la inteligencia artificial, el pensamiento sistémico y un enfoque transformativo del aprendizaje.
La Universidad Franz Tamayo es un claro ejemplo de esta visión. Con programas que integran el emprendimiento y la innovación en su proceso formativo, la universidad está preparando a la próxima generación de líderes y emprendedores que podrían ser los responsables de un renacimiento económico en Bolivia.
Pero no solo la educación es importante. López también hace un llamado a repensar el papel del Estado y la empresa privada. Ambos deben jugar un rol crucial en la creación de oportunidades laborales y en fomentar la creación de ideas disruptivas que permitan a Bolivia escalar a un nivel global. Está convencido de que el fomento de la innovación y la creatividad debe ser una prioridad para que el país pueda crecer de manera exponencial en los próximos años.
La receta para el futuro: talento humano, educación y tecnología
El futuro de Bolivia dependerá de la inversión en su gente. López concluye con una idea poderosa: «A través de una educación de calidad, la aplicación de nuevas tecnologías y el impulso a la creatividad, Bolivia puede superar sus retos económicos y posicionarse en el mercado global con una nueva generación de líderes y emprendedores».
Así que, si Bolivia logra redirigir sus esfuerzos hacia el talento humano, su gente podría ser la clave para abrir nuevas puertas hacia un futuro más próspero, independiente de los altibajos de los mercados internacionales y los recursos naturales.
Un mural pintado en la fábrica de Chocolate Harasic, en la Av. Sargento Flores, en Oruro. (Foto: Facebook-Sergio Gareca)
Redacción | Activo$ Bolivia
¿Quién no ha disfrutado de un delicioso chocolate Harasic? Esta marca, con más de un siglo de historia, se ha convertido en un símbolo de calidad y tradición en Bolivia. Pero, ¿cuál es el secreto detrás de su éxito?
Un viaje desde los Balcanes
La historia de Harasic comienza a principios del siglo XX, cuando cuatro hermanos yugoslavos, Esteban, Tonko, Juan y Gerónimo Harasic Gardilcic, decidieron emprender una aventura en tierras bolivianas. Llegaron a Oruro en 1905, y en 1909, fundaron la fábrica de chocolates que lleva su nombre. Su visión: crear chocolates de alta calidad, elaborados con cacao puro.
El sabor de la tradición
Desde sus inicios, Harasic se destacó por la calidad de sus productos. El chocolate tradicional, el extrafino y el amargo se convirtieron en los favoritos de los bolivianos. La clave de su sabor inigualable reside en la selección de los mejores granos de cacao y en un proceso de elaboración que conserva las técnicas tradicionales.
Harasic en la actualidad
A lo largo de los años, Harasic ha sabido adaptarse a los cambios del mercado, sin perder su esencia. La marca ha expandido su línea de productos, ofreciendo una variedad de chocolates para todos los gustos. Sin embargo, como toda empresa, Harasic también enfrenta desafíos.
Recientemente, la fábrica de Chocolates Harasic anunció un cierre temporal debido al aumento en los precios de la materia prima, principalmente el cacao. Esta situación refleja las dificultades que enfrentan muchas empresas en el contexto económico actual. Sin embargo, unos días después, la marca informó haber superado los obstáculos y que retomaba su trabajo para seguir endulzando la vida de los bolivianos.
¿Por qué Harasic es tan querido?
Hay varias razones por las que Harasic tiene la preferencia del público. Entre ellas está la calidad de sus chocolates, que son elaborados con cacao puro, lo que les da un sabor intenso y auténtico; la tradición, porque Harasic forma parte de la historia industrial de Bolivia y sus productos evocan recuerdos de infancia y momentos especiales; la variedad, porque la marca ofrece una amplia gama de chocolates, desde los clásicos hasta las nuevas creaciones; identidad, porque Harasic es un símbolo de orgullo para los bolivianos, una marca que representa la calidad y el trabajo bien hecho.
Harasic no sólo es un producto de calidad Hecho en Bolivia, sino que es una historia de pasión, tradición y sabor que ha conquistado el corazón de los consumidores.
Así se veía la Cervecería Taquiña en 1995, año de su centenario.
Redacción | Activo$ Bolivia
Taquiña, esa cerveza que alguna vez fue el alma de Cochabamba, parece estar perdiendo su brillo. ¿Qué sucede con esta marca que durante décadas fue sinónimo de tradición y sabor local?
Un poco de historia
Fundada en 1895, Cervecería Taquiña tiene una rica historia ligada al desarrollo de Cochabamba. Desde sus inicios, se destacó por utilizar agua pura de la Cordillera del Tunari, lo que le daba un sabor único y refrescante. La empresa creció junto con la ciudad, convirtiéndose en un símbolo de identidad cochabambina.
La historia de Taquiña data de fines del siglo XIX, cuando las inversiones de los industriales Rodolfo Krüger, Luis Bessand Frere y Miguel Hunner se juntaron para dar inicio a una industria que sería casi un sinónimo de Cochabamba. Entre 1890 y 1891 conformaron una sociedad para producir cerveza y compraron lotes en las faldas del cerro Taquiña para instalar la fábrica. Años después, unieron fuerzas con el empresario Braulio Maldonado (que fabricaba cerveza en Colcapirhua) y conformaron jurídicamente Cervecería Taquiña. En 1895, la empresa se convirtió en una sociedad anónima con 21 accionistas.
En 1972, empezó un nuevo periodo para la empresa porque pasó de ser local a ser una industria nacional. En esa época consolidó mercados en otras ciudades del país y comenzó a trabajar en la exportación.
Años después se convirtió en un grupo económico que dio lugar a la fábrica de envases FABE, Maltería Linde y a Cervecería Boliviana del Oriente (en Warnes, Santa Cruz). Además, alentó la formación de Alas Andina y Aero Jet.
Taquiña tuvo un efecto multiplicador porque generó fuentes de empleo, promovió el desarrollo agrícola al aportar al desarrollo de variedades mejoradas de cebada, generó riqueza porque estuvo entre las principales industrias de Bolivia, aportó con impuestos al Estado y a los municipios en los que tenía presencia y también generó movimiento económico para las empresas que le proveían servicios.
Una muestra de que fue un importante motor económico es que a sugerencia de los ejecutivos de Taquiña, la Alcaldía de Cochabamba instituyó la Feria Exposición de Cochabamba, un evento anual creado en 1971. Para 1974 alcanzó otro nivel y ese año se realizó la primera Exposición Internacional de Cochabamba y estrenó el ahora conocido como Campo Ferial de Alalay. Si creciste en Cochabamba en los años 80, seguramente recordarás que el “Show de Taquiña” era el plato principal y ayudó a promover la carrera musical de varios grupos nacionales que hoy son clásicos y también trajo algunos grupos de países vecinos.
La llegada de la CBN
En 1999, Taquiña fue adquirida por la Cervecería Boliviana Nacional (CBN). Si bien esto significó una mayor inversión y modernización, también marcó el inicio de una nueva etapa donde la marca comenzó a compartir protagonismo con otras cervezas del portafolio de la CBN, en especial la Paceña.
Con el pasar de los años, la cerveza cochabambina dejó de brillar y los consumidores parecen haber sido conquistados por otras marcas. En 2020, la CBN quiso reavivar la marca con una propuesta innovadora y lanzó Chicha Taquiña; pero la jugada, al parecer, no logró su objetivo porque no conquistó el paladar del consumidor. Para 2021 se conoció que la cervecería atravesaba una de sus peores épocas.
Esta era la sala de embotellado a fines del siglo XX.
¿Qué está pasando?
En los últimos años, la presencia de Taquiña en bares, restaurantes y supermercados ha disminuido notablemente. Otras marcas de cerveza, tanto nacionales como internacionales, han ganado terreno, eclipsando a la tradicional cerveza cochabambina.
Son varias razones las que podrían estar ocasionando el relegamiento de Taquiña. Es posible que la CBN esté priorizando otras marcas dentro de su portafolio, dejando a Taquiña en un segundo plano. Los jóvenes consumidores pueden estar buscando cervezas con sabores y estilos diferentes, alejándose de las cervezas tradicionales. El mercado cervecero se ha vuelto más competitivo con la llegada de nuevas marcas y la creciente popularidad de las cervezas artesanales. También podría ser que las campañas de marketing de las otras marcas son más efectivas, llegando a un público más amplio.
Taquiña no es solo una cerveza, es parte de la historia y la identidad de Cochabamba. ¿Qué crees que se podría hacer para preservar esta marca emblemática y que vuelva a recuperar su lugar en el mercado?
(Con datos de la Red y de la investigación de Ernesto Daza Rivero, publicada en 1995 bajo el título: “Apuntes históricos de Cervecería Taquiña S.A. en ocasión de su centenario-Ecología y Medio Ambiente”)
En el tablero económico boliviano, los empresarios están lanzando una alerta roja sobre un posible incremento salarial que, en su opinión, podría desatar una crisis mucho más profunda. Juan Pablo Demeure, presidente de la Federación de Entidades Empresariales Privadas de Cochabamba (FEPC), no se anda con rodeos: el aumento salarial que exige la Central Obrera Boliviana (COB) sería «un jaque mate definitivo» para muchas empresas.
En una entrevista reciente, Demeure explicó que la situación económica actual no es la ideal para aumentar sueldos sin consecuencias graves. Según el empresario, un aumento salarial del 15% al salario mínimo y del 20% al haber básico, tal como piden algunos sectores, es insostenible. Para él, esta medida podría generar una espiral inflacionaria, es decir, más inflación, más aumento de precios, y un daño directo a la liquidez de las empresas. “Este aumento, lejos de solucionar problemas económicos, solo perjudicaría a las empresas formales”, destacó.
El panorama ya no es sencillo para los empresarios bolivianos. La escasez de dólares y el aumento de los costos operativos están golpeando fuertemente a muchas empresas. Demeure explicó que varios empresarios se han visto obligados a frenar proyectos de inversión y, en algunos casos, a reducir su capacidad de contratación debido a este clima económico complicado.
«Si este aumento salarial se lleva a cabo, las empresas no podrán sostenerse, y eso se traducirá en despidos masivos y, muy probablemente, un auge en el empleo informal», advierte el presidente de la FEPC. Según él, esta sería una consecuencia devastadora para el país, que se vería atrapado en un círculo vicioso de inflación y desempleo.
Lo que Demeure pide es simple: más diálogo con las autoridades y un análisis técnico y realista de la situación antes de tomar decisiones que puedan ser desastrosas para la economía nacional. En lugar de optar por medidas radicales, los empresarios sugieren buscar alternativas que no pongan en peligro la estabilidad económica del país ni el futuro de los trabajadores.
Así que, en este punto, la gran pregunta es: ¿es realmente el aumento salarial la solución para los problemas económicos, o sólo una chispa que podría encender un incendio mucho mayor?
Bolivia es miembro de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) desde 1945.
Edwin Carpio San Miguel | Activo$ Bolivia
Bolivia es miembro de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) desde 1945 y ha usado ese importante escenario para defender temas como la protección del medio ambiente, los derechos de los pueblos indígenas o su histórica demanda marítima.
En varias ocasiones, Bolivia ha criticado el sistema global y ha pedido cambios en el Consejo de Seguridad, cuestionando el poder de los países más influyentes.
En 2017 Bolivia fue miembro no permanente del Consejo de Seguridad y, desde ahí, apoyó a Palestina, criticó intervenciones militares y pidió más respeto por la soberanía de los países.
También incidió en temas gravitantes como el acceso al agua. El 28 de julio de 2010, la Asamblea General de la ONU aprobó una resolución que reconoce el acceso al agua potable y al saneamiento como un derecho humano esencial. Esta iniciativa fue impulsada por Bolivia y mereció el apoyo de los 122 países miembros y 41 se abstuvieron, incluyendo EE.UU., Canadá y el Reino Unido.
El embajador boliviano ante la ONU, Pablo Solón, declaró entonces: «Sin agua, no hay vida. Negar este derecho es negar el derecho a la existencia.»
Pese a estas destacadas actuaciones, desde el 1 de enero de 2024, Bolivia ya no puede votar en la Asamblea General de la ONU porque debe $us 780.000 en cuotas pendientes a la organización.
No es el único país en aprietos, también perdieron su voto Afganistán, Venezuela y Santo Tomé.
Bolivia es miembro fundador de la ONU junto a 51 países desde 1945, pero ahora su rol ha pasado a un lugar secundario por un tema burocrático y administrativo.